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Energía Solar Térmica

La tecnología fotovoltaica ha experimentado bajas exponenciales de precios, esto hace que las industrias se pregunten qué pueden ofrecer a futuro para la energía solar térmica, algo que desde hace un buen tiempo ha conquistado el corazón de muchos hogares y empresas a nivel mundial, pero ¿realmente vale la pena invertir en esto? Pues la respuesta te la daremos a continuación, así que no te despegues de la pantalla.

En este mundo de tecnología solar, hay varias incógnitas, una de ellas es cuál es mejor para aprovechar los rayos solares, si funcionan bien, y cuál es la diferencia entre energía térmica y energía fotovoltaica, pues bien… vamos a definir primero lo primero. La energía solar térmica concentra una cantidad de luz solar para luego convertirlo en calor y así usarlo de muchas maneras; por otro lado, está la tecnología fotovoltaica que, a través de celdas solares, convierten la radiación solar en electricidad directamente.

Cómo funciona la energía solar térmica

Los equipos especiales de esta fase, convierten la radiación solar en calor gracias a un procedimiento sencillo. Los paneles solares puede ser planos (paneles), o tubos vacíos), ellos acumulan radiación solar para calentar un líquido basado en agua y anticongelantes que recorren sus circuitos; este calor se transfiere en un intercambiador a un circuito secundario donde está el agua depositado en la reserva del sistema.

Energía solar térmica Vs.. Energía fotovoltaica

La energía fotovoltaica es mucho más moderna que la solar térmica. Esta requiere el uso de semiconductores de silicio en sus paneles solares, ellos se encargan de generar electricidad cuando entra en contacto con fotones de luz solar. La corriente que se crea es directa, lo que amerita uno o varios inversores para que se convierta en corriente alterna (el de los hogares y empresas).

Los sistemas fotovoltaicos son más complejos, pero una de las mejores opciones, pues son más inexpugnables, es decir, calientan mejor el agua.

Versatilidad

La ventaja de los kits solares de energía solar térmica, es la versatilidad con la energía fotovoltaica. Mientras que la energía solar térmica se limita a calentar el agua, en cambio, los sistemas fotovoltaicos tienen más aplicaciones: iluminación de edificios, bombeo de agua, alimentación de electricidad a electrodomésticos y vehículos eléctricos, etc.

Durabilidad

Los equipos fotovoltaicos tienen más vida útil, si son de silicio tienen incluso garantías de 10 a 12 años, y las placas solares de esta categoría tienen hasta 25 años. Por otro lado, los equipos de energía térmica solar no pasan de los 5 a 10 años de garantía.

Pero ojo, esto no abarca totalmente la vida útil de los equipos. Un equipo de termosifón puede tener larga vida útil como los fotovoltaicos, solo si tienen el mantenimiento apropiado.

Mantenimiento

Los equipos fotovoltaicos no tienen piezas móviles, una gran ventaja, pues no necesitan de tanto mantenimiento anualmente. Muchos fabricantes incluyen la posibilidad de que el usuario lo monitorice de forma remota a través de una app y así ahorrarse el gasto de un profesional.

En cambio, el mantenimiento de los aparatos de energía solar térmica es un chin más complicado, los equipos de circulación forzada cuentan con bombas hidráulicas que necesitan revisiones y mantenimientos más minuciosos, si no se cumplen, puede generar muchos problemas incluyendo el bajo rendimiento de los equipos, la corrosión del depósito de agua, o la baja temperatura del agua por la pérdida de refrigerantes (que hay que sustituirlo de vez en cuando).

Eficiencia

Los equipos de energía solar térmica tienen mayor eficiencia que los fotovoltaicos al momento de captar los rayos solares, teniendo una eficiencia de 80 a 90%, sabiendo que los paneles generalmente no superan el rango del 20%. Los paneles de energía solar térmica, a diferencia de los fotovoltaicos, producen agua caliente en los días fríos o nublados; la diferencia de los sistemas de energía fotovoltaica, que tienen baterías más sofisticados (fabricados con litio)

Omnipilot

El autoconsumo fotovoltaico establece una compensación por el exceso de energía producida que permite a la red eléctrica obtener este excedente de energía sin cargos añadidos, siendo así un proceso de eficiencia para la energía fotovoltaica.

Precio

La energía solar térmica es más barata, si un equipo compacto de termosifón para calentar agua, está entre los USD $2.300 – USD $4.600. Los kits fotovoltaicos sin baterías, es decir, los más sencillos, para autoconsumo residencial, están entre USD $5.200 – USD $8.100. Sin embargo, esto no impide que las personas no elijan la tecnología que más quieran.

Espacio de instalación

Aunque no parezca un detalle importante, no deja de ser un factor clave al momento de elegir entre una u otra tecnología. Quitando las instalaciones industriales, los equipos de energía solar térmica son menos voluminosos y ocupan menor espacio que los equipos fotovoltaicos, pues estos paneles solares tienen mayor demanda de espacio. Generalmente estos cubren una parte de las fachadas de las casas e incluso edificios, aunque claro, todo depende la potencia que se quiera instalar. Mientras más grandes sean los equipos, más espacio va a necesitar.